podríamos
desnudarte y lavarte los
pies podríamos
vestirte y hacerte llorar podríamos
mirarte y ver siglos
de caminos en la niebla.
Traeme flores. Traeme flores. Traeme flores. Estoy triste. Estoy loco. El futuro es
un perro muerto en la carretera. Traeme flores. Tengo una pistola. Tengo una idea. Pero sólo
espero que un día los gusanos desaten mi carga. Traeme flores. Traeme flores. Que Dios me
bendiga. Traeme flores. Veo cosas. Veo una puerta cerrada. Veo a mi madre vestida de negro. Traeme flores. Voy a llamar
a las ratas y voy a guiarlas. Clavaremos el
sol en las tripas
del mundo. Traeme flores. Traeme flores. ¿Cuándo
todos se vayan quién
dormirá a los niños? ¿Cuándo
todos se vayan quién
dormirá a los niños? Traeme flores y un poco de
pasta. Traeme flores.
Marcharemos en
silencio por los campos
de ortigas. Arrastrando
a nuestros hijos marcharemos
en silencio. Días y
noches enteros como viejos
soldados sin memoria. Buscando una
guerra ya perdida encima de Dios.
Debajo de los muertos. ¿Quién
tocará las campanas? ¿Quién
rezará por nosotros? ¿Cuántas
lágrimas harán falta para apagar
este infierno? Marcharemos sin
mirarnos. Nadie sabrá
hasta dónde. Nadie sabrá
hasta cuándo. Y en el viento
escupirá su sangre el himno de
la desgracia.
Dame otra vez
el dolor de las mujeres
violadas. Esa cosa sin
fondo para volver
al principio. Yo no espero
nada. Yo no quiero
a nadie. Voy por ahí contando las
cruces, como un profeta
perdido en el país
de los muertos.
canción
de cuna cuentame un cuento,
quiero dormir cierra los ojos,
ya estoy aquí muerdeme el
alma niña al morir y vamos juntos,
bello jardín. cancion de cuna.
olas de mar. y ya no siento
tu respirar. cantame niña.
voy a mezclar agua salada
con lágrimas. llueven mejillas.
y al salpicar dicen tu nombre
las gotas del mar.
Ahora quieres
que te persiga por los bosques. Con mis dientes
de lobo, mi tristeza de lobo. Te cubres de
hojas muertas y de silencio y a veces empezamos
al final y a veces terminamos
al principio. Vienes con las
manos llenas de arándanos. Desnuda como
una oración sin Dios. Te sientas sobre
mi cara, me mojas, me mojas. Sabes escribir
el destino en el fondo
de oscuras promesas. Y yo corro entre
los árboles cruzando noches
eternas. No sé
quién eres. No sé dónde estás. Sólo
sé que hay mil caminos. Sólo
sé que hay mil caminos. Sólo
sé que hay mil caminos que llevan a
ninguna parte.
a 26 julio
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